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¿Sabe dominar sus gestos? ¿Se siente seguro en una estación de metro? Un avatar puede dar la alerta de movimientos sospechosos. Hermes en la mitología griega es el Dios que conecta a los hombres con los dioses, les comunica sus actos. Profanamente, "Human Expressive Representations of Motion and their Evalutation in Sequences", HERMES, nace con muchas esperanzas y deseos, pero con un objetivo constante de sus creadores: mejorar su sistema para que las expectativas que sobre él hay puestas se ajusten a la realidad. Que los robots tengan sentimientos y emociones, de momento, es sólo ciencia ficción, producto de entretenimiento servido en bandeja por Steven Spielberg en la película "Artificial Intelligence: AI". Tampoco estamos en 2035, año en el que transcurre la acción de "I Robot", donde Will Smith descubre que los robots no sólo son capaces de rebelarse contra el ser humano sino que también pueden tener pasiones. Ni Hermes es un sucedáneo de sistema "Pre Crime", que dirigía en "Minority Report" Tom Cruise y que se anticipaba a delitos futuros. Sin embargo, este proyecto coordinado por un consorcio de investigadores europeos, desde el Centro de Visión por Computador (CVC) de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) (España), ha desarrollado un sistema cognitivo computacional integrado por cámaras de vídeo y software que es capaz de reconocer y de prever el comportamiento humano, analizarlo, así como describirlo en lenguaje natural. Sus aplicaciones son variadas y se desarrollan actualmente en temas que tienen que ver con la vigilancia inteligente, la prevención de accidentes, el márquetin, la atención a personas ancianas o la psicología, entre otros. Juan José Villanueva, profesor emérito del Departamento de Ciencias de la Computación que pertenece al Centro de Visión por Computador de la Universidad Autónoma de Barcelona, ha sido el coordinador del proyecto. Análisis del comportamiento "El grupo de Interpretación de Secuencias de Imágenes del Centro de Visión por Computador es el que se ha hecho cargo de la investigación, ya que advirtió la posibilidad de introducir inteligencia en los procesos de análisis del comportamiento y especificar ese comportamiento con un lenguaje más próximo a las personas", comenta el investigador, desvelando que Hermes puede describir lo que está ocurriendo en escenas donde aparecen personas y hacerla en lenguaje natural y en diferentes idiomas en la pantalla del ordenador. Aunque el profesor también indica que podría ser un avatar quien desde la pantalla vaya contando lo que pasa en la escena que observa. En visión por computador se puede, a partir de la información proporcionada por una cámara, conocer algo simple de lo que está pasando: detectar la persona, seguirla y luego tener visión en tres dimensiones de ella. Es lo que se conoce como bajo nivel. Pero conectar este bajo nivel de proceso con algo más complejo como describir en un lenguaje lo que está pasando es mucho más difícil. "A partir de aquí es en lo que se hemos trabajado, porque la primera parte se puede describir de manera sencilla, pero nos interesa más acercarnos a lo humano: ver si una persona mueve las manos de una manera determinada, sus gestos para ver si está triste, alegre", dice. Agujero semántido A partir de la obtención de la información de si es una persona, de realizar un seguimiento y ver si se mueve a una cierta velocidad y hacia donde, si se agacha o corre, etc. Todo esto constituye lo que se conoce como bajo nivel. Cuando se quiere contar en un cierto lenguaje ya sea formal o natural, por ejemplo, estamos entrando en los niveles semánticos de descripción o de alto nivel . Conectar las dos mundos: el bajo nivel con el alto nivel que para los humanos es tan fácil, para los sistemas basados en ordenadores es muy complejo, entre ellos hay lo que se denomina el agujero semántico (Semantic gap). "Rellenar ese agujero ha sido costoso -indica el profesor- y es en lo que hemos estado trabajando. Si el sistema ve un comportamiento sospechoso envía la orden para que la cámara giré y enfoque el cuerpo o la cara de esa persona". Según Villanueva, pese a lo que pueda parecer, este proyecto no es ciencia ficción y con modestia reconoce que hay otros grupos de estudio en el mundo desarrollando aspectos parciales de lo que sería Hermes. La extracción de información de las cámaras no es fácil y "mucho menos para un ordenador", dice el investigador. "Se trata de un sistema muy primario. Hemos conseguido muchas cosas. Con este proyecto académico se abre una puerta, pero aún queda mucha investigación y estamos muy lejos de las cosas que hace Robocop", comenta en tono jocoso. Una de sus aplicaciones se centra en la posibilidad de analizar y descubrir potenciales comportamientos inusuales y advertir sobre ellos. Por ejemplo, Hermes puede avisar de que un hombre entra en los lavabos de un aeropuerto con una bolsa y tiempo después sale sin ella. "Quizá este comportamiento no signifique nada. Puede que la bolsa se la haya entregado a otra persona, pero si no es así la alerta está activada", explica Villanueva. Según los psicólogos, el sistema puede ser muy útil para detectar si alguien miente, y el investigador resalta que puede ser muy operativo para aquellas personas que viven solas, pues siempre puede alertar sobre un desvanecimiento o si un anciano no se levanta o no se mueve desde hace tiempo. En el desarrollo de Hermes está implicada además de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB), la de Oxford en Gran Bretaña, Karlsruhe en Alemania, Aalborg en Dinamarca, el Politécnico de Zurich y la empresa Answare Technologies. Se ha desarrollado dentro del 6º Programa Marco de Investigación de la Unión Europea y ha recibido varios premios científicos en los mejores congresos especializados. fuente:globedia.com